Esta es la mermelada más fácil y deliciosa que he comido jamás. Las semillas de Chía le dan un consistencia gelatinosa perfecta y la miel el dulzor natural sin exceso. En sólo diez minutos puedes tener está maravilla para tus tostadas o imagina que increíble puede ser sobre una tarta!!!
Me encanta tomarla para desayunar con crackers de centeno y mi mantequilla de almendras con vainilla. Estoy segura de que la vas a adorar!!!
Ingredientes
250g de Moras
250g de Frambuesas
2 Cs de Semillas de Chía
2 Cs de Miel
50ml agua
Preparación
Comenzar lavando las frutas. En una cazuela mediana poner las frambuesas y las moras, añadir las dos cucharadas de miel y el agua. Tapar y hervir a fuego medio durante unos cinco minutos. Con un tenedor aplastar las frutas, yo prefiero hacerlo con un aplasta patatas ya que es mucho mas rápido. En este momento ya se pueden poner las semillas de Chía, remover con una cuchara y cocinar durante unos tres minutos más removiendo de vez en cuando para que las semillas se repartan de manera uniforme. Retirar del fuego y dejar enfriar en un recipiente de vidrio. Se conserva en la nevera aproximadamente una semana.